sábado, 25 de diciembre de 2010

¡feliz navidad!

La Academia Área les desea unas felices fiestas y le pide a los Reyes Magos que traigan los mejores éxitos a todos los estudiantes.
(Las clases comenzarán de nuevo el día 7 de Enero de 2011.)

lunes, 6 de diciembre de 2010

la constitución, el rey y la educación

Escrito está en el Artículo 27 de nuestra Constitución:
1. Todos tienen el derecho a la educación. Se reconoce la libertad de enseñanza.
2. La educación tendrá por objeto el pleno desarrollo de la personalidad humana en el respeto a los principios democráticos de convivencia y a los derechos y libertades fundamentales.
3. Los poderes públicos garantizan el derecho que asiste a los padres para que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones.
4. La enseñanza básica es obligatoria y gratuita.
5. Los poderes públicos garantizan el derecho de todos a la educación, mediante una programación general de la enseñanza, con participación efectiva de todos los sectores afectados y la creación de centros docentes.
6. Se reconoce a las personas físicas y jurídicas la libertad de creación de centros docentes, dentro del respeto a los principios constitucionales.
7. Los profesores, los padres y, en su caso, los alumnos intervendrán en el control y gestión de todos los centros sostenidos por la Administración con fondos públicos, en los términos que la Ley establezca.
8. Los poderes públicos inspeccionarán y homologarán el sistema educativo para garantizar el cumplimiento de las Leyes.
9. Los poderes públicos ayudarán a los centros docentes que reúnan los requisitos que la Ley establezca.
10. Se reconoce la autonomía de las Universidades en los términos que la Ley establezca.
Y del Rey subrayamos estas palabras pronunciadas en la Cumbre Iberoamericana celebrada en el Mar de Plata:
"La educación debe situarse en el primer plano de las políticas públicas de mayor impacto", porque "es el más firme sustento tanto para el desarrollo personal como para la prosperidad colectiva, al tiempo que contribuye decisivamente a la cohesión social".

domingo, 5 de diciembre de 2010

mi-ma-ma-me-quie-re-yo-qui-e-ro-a-mi-ma-ma

Leer y escribir son los primeros pasos para cualquier cabeza pensante que se bambolea sobre unos hombros.
Pero, una vez que aprendemos a leer y a escribir y  sus mecanismos pasan a formar parte de nuestra vida como el cola-cao de las mañanas, nos olvidamos hasta con soberbia de los primeros balbuceos que ensayábamos al intentar leer los letreros de los comercios cuando íbamos de la mano de nuestra madre o de los primeros trazos temblorosos que emborronamos en un papel con la ingenua ilusión de que alguien nos leyera.
Tristemente, hay cosas cuyo valor despreciamos por considerarlas comunes y básicas. No las cultivamos. Las damos como por hechas. Acaban por perder importancia para nosotros. Y somos nosotros los que acabamos por desorientarnos en un mundo en el que las palabras ya no actúan como semáforos.
De todas formas, si todavía fuéramos capaces de asombrarnos con nuestra mirada, nos parecería algo fantástico y como de ensueño observar cómo unos niños, con sus grandes y coloridos mandilones y los mocos resbalándoles por la nariz, aprenden a leer y a escribir. Y así, de paso, podríamos recuperar un poco de la confianza perdida en las palabras.
Por cierto, todavía hay en nuestro planeta 781 millones de personas que no saben leer si viniera el caso ni su propia condena a muerte ni escribir un "te quiero" sobre una servilleta de papel.

miércoles, 1 de diciembre de 2010